Un lagrimón

Sorry amigos pero buscando música para el blog me agarró la nostalgia con éstos temas y quería compartirlos, les puedo asegurar que hacer ésta página no es nada fácil, así que por ésta vez seguro éstoy perdonado.

Mateando en el tiempo

Es verdad que el mate une. Apesar del tiempo, podemos encotrarnos nuevamente.

Seguramente somos otras personas, con distintas experiencia, algunas parecidas otras no.

Chateamos por las noches tratando de rescatar aquellas cosas que nos unieron, que nos hacen felices, que nos hacen vernos a nosotros mismos, y preguntarse, cuanto hemos cambiado. Hablando de nuestros hijos, recordando momentos que se nos habían escapado de nuestras memorias, escuchando canciones de nuestras épocas, cargandonos sobre como actuamos y como hubiesemos actuado. Programamos con nuestra mente encuentros irrealizables, y cruzamos los dedos para que ésta alegría de compartir nuevamente con seres queridos no se termine jamás. Porque esperamos tanto tiempo?

Tal vez me ayuden a encontrar las respuestas, tal vez nunca nos respondamos otras.

Aquí Carla, José y Greta en la casa de Clarisa.

Soplando recuerdos

Otro cumpleaños feliz de Clarisa en la casa de Pago Largo, aquí presentes Sergio, Fabián, Rubén, Greta, Marcelo, Graciela,Carina Galbucera,Andrea, Gerardo, Daniel, José Luis,más una amiga Silvia Trotta y Cecilia la hermana. Habanopas presente en la vida de una amiga nuestra.

Más de la noche de Gala

La noche de fiesta en la graduación del Club Español, aquí Clarisa con su papá, con Pinchi y Albetico, una grupal y la mesa donde se sentó acompañada de Adrián, Andrea,Fabián , Roberto y José Luis.

Fiesta de disfraces!!!

A pedido de Fernando la subo ya que fué en la terraza de la casa que le alquilabamos a Clarisa, en calle Uriarte, en ella hay compañeros de mi hermana de la secundaria, pero también están presente, Clarisa,la hernana, Greta,Fernando, una noche inolvidable que se podría repetir.

El Jeep de la aventura

Esta foto pertenece a una de las tantas noches que fuimos por zona norte de bar en bar, de boliche en boliche, con el jeep del flaco Di Leo, nos sentiamos adultos, cantabamos por el bolulevar Rondeau, los cabellos al viento, los primeros cigarrillos y la inmensa sensación de que nada podía detenernos.Clarisa me cedió ésta foto para compartir, creo que es la única que registró aquellos buenos momentos.